En 1988 nació como empresa familiar pero ahora todo ha ido creciendo... Aunque han sabido volver a los inicios y ser compañeros que se preocupan unos por otros. Muchos de los proveedores les dicen cuando les ven: «Sois unos de nuestros clientes más antiguos». Eso es algo que enorgullece al equipo de Fontaco, empresa instaladora malagueña especializada en fontanería, saneamientos y construcciones que ofrecen servicios que van desde agua potable, reposición de pavimentos, registros y carpintería metálica, además de una larga lista de trabajos relacionados. Aunque hacen una reclamación inmediata en su sector: «Hay momentos de gran actividad que todos estamos aprovechando, pero en contra tenemos una falta de personal formado que nos impide crecer y satisfacer la demanda existente», reclama el director-gerente de la empresa, Manuel Martín Porras.

En Fontaco están en plena transformación de su visión de clientes, ya que las necesidades así han hecho que vayan adaptándose a los cambios. «Desde hace 35 años casi el 90% de nuestra empresa ha sido obra pública pero nos dimos cuenta de que estábamos al orden de ellos. Es por eso que ahora estamos dando un giro hacia el cliente privado para trabajar por calidad, fidelidad y confianza. Estamos llevando a cabo un proceso de fidelización del cliente buscando siempre la mejor opción para ellos, no para nosotros», asegura Martín Porras. Además, buscan el trato directo y más personal con sus clientes, algo que confiesan se está perdiendo en el sector y muchos lo echan de menos.

Su temporada, la afrontan como un punto de inflexión de este cambio de mirada que están haciendo desde la empresa. «Tenemos un año de reajustes para volver a coger impulso y dar un salto», confiesa el director de Fontaco antes de comparar haciendo un pequeño análisis de la temporada pasada: «Fue extraño y complicado, lleno de sobresaltos con una subida desmesurada de precios en la materia prima, energía, transportes... La mayoría de las empresas de nuestro entorno lo han pasado mal y no han podido lograr los objetivos económicos, hemos tenido que conformarnos con reducir los daños», revela Martín Porras.

Y desde Alhaurín de la Torre para todo el territorio nacional valoran estos meses de 2023 con un arranque y con la fuerza que les hará compensar esos «sobresaltos» de 2022. «Nuestra próxima inversión va a ser apostar por la tecnología porque no paran de salir nuevos productos y maquinaria a los que estamos muy atentos. En cuanto a otras inversiones, vamos a apostar por la formación de nuestros trabajadores tanto a nivel teórico como práctico», concluye el director-gerente de Fontaco.